El Levante ha logrado clasificar a UWCL por quinta vez en su historia con una enorme superioridad en el campo

Desde la llegada del técnico José Luis Sánchez Vera a los mandos del Levante, el equipo solamente ha conocido la dinámica ascendente y ha seguido mejorando hasta volver a clasificar en competición europea. La última vez que las granotas llegaron a Europa fue en la temporada 2020/21. Curiosamente, quedando por detrás del Real Madrid y por delante del Atlético. El fútbol femenino español ha caído en un binomio entre Real Madrid y Barça, pero la llave para romperlo pasa por Buñol. El tercer puesto que da acceso a Champions, ya es una realidad con los 63 puntos que ha conseguido el Levante. Un equipo que, aunque no ha gozado de una gran recta final (dos victorias de cinco posibles), ha hecho válido el colchón de 11 triunfos en sus primeros 15 partidos del curso. Una racha merecedora de Europa.

Para entender como ha sido la temporada del Levante, nos acompaña Christu, cofundador de Woso Magazine y periodista especializado en el club granota. «La temporada del Levante es el resultado de la formación de un equipo que ha sabido crecer, progresar y mejorar en todos los aspectos juntos durante toda la temporada”. Y es que en clave del fútbol nacional, las de Sánchez Vera han sido el equipo más ha hecho sufrir este año al Barça. Es cierto que no consiguieron rascar ningún punto del Johan Cruyff, pero poco les faltó. Perdieron 2-1, pero estuvieron cerca de profanar el templo culé.

La cuenta pendiente

Después de una temporada sin conseguir el pasaporte europeo, el Levante volverá a Europa para buscar mejorar sus registros anteriores. En la 2021/22, las granotas iniciaron desde la primera ronda de la fase previa, superando por la mínima a Celtic y Rosenborg. Un inicio ilusionante que acercaba a las granotas a la fase de grupos. Pero los astros se desalinearon, y acabaron conviertiendose en víctimas de un Olympique de Lyon que posteriormente ganaría la final ante el Barça.

Pero para conocer la primera aventura europea del Levante hay que remontarse a la temporada 2001/02. En aquella temporada el equipo se enfrentó en la fase de grupos al histórico Frankfurt (Alemania), Codru Chisinau (Moldavia) y CSC Yerevan (Armenia). Quedaron segundas, pero no fue suficiente para conseguir el pase a la fase final, y es que por aquel entonces tan solo clasificaba el primero. Un año después, el equipo volvió a repetir participación. Esta vez los rivales serían el Arsenal Ladies (Inglaterra), el Gömrükçü (Azerbayán) y el Eendracht Aalst (Bélgica). De nuevo, el equipo quedaba segundo, siendo insuficiente para pasar de ronda.

Una época dorada que no se volvió a repetir hasta la temporada 2008/09. Esta vez, en un formato con más equipos, que requería de dos fases previas. En la primera de ellas, el Levante se impuso a Sparta de Praga (República Checa), Tienen (Bélgica) y Skiponjat (Macedonia). Sin embargo, en la segunda fase, Duisburg (Alemania) y Brondby (Dinamarca) clasificaron en detrimento de las españolas y el Naftokhimik (Ucrania). Tuvieron que pasar doce años para que el equipo consiguiera regresar a Champions. Y es que con la apertura de plazas, quedar terceras les daba billete.

El triángulo del gol

En un mundo donde estamos acostumbrados a ‘nueves’ superlativos al más puro estilo Haaland, el Levante de Sánchez Vera ha encontrado hasta tres perfiles que se compenetran a las mil maravillas. Mayra Ramírez, fichada en verano, ha supuesto una de las grandes noticias para el club. “Lo que ha aportado al equipo desde su llegada ha sido brutal. Tanto a nivel de juego como de goles» afirma Christu. Y a ella hay que añadirle el nivel de Alba Redondo y la presencia de Natasha Andonova actuando por detrás y aportando la pausa necesaria para un fútbol elegante.

Por muy asombroso que pueda ser el triángulo ofensivo del Levante que este curso ha dejado a más de uno con la boca abierta, quedaría en el olvido de no ser por los hasta 42 goles que suman entre las tres. Alba Redondo es sin duda el foco de todas las miradas. 26 goles en la competición de la reguladirad que la han llevado a ser la máxima goleadora de la Liga F. Un hito que ha terminado con la hegemonía del Barça en la cima del Pichichi tras cinco años consecutivos.

Así opina Christu: “La temporada de Alba Redondo es impresionante. Es el reflejo de la estabilidad emocional a nivel profesional como personal que ha conseguido la jugadora. Alba ha conseguido ser estable y estar bien tanto física como mentalmente durante toda la temporada”. Pero pasar a la historia no es sencillo sin una competencia de nivel. En este caso, el Levante cuenta con una revulsiva como Tatiana Pinto, que llegó con pies de plomo del Sporting CP y cierra la temporada en puestos Champions, 11 goles a la espalda y una oferta del Paris Saint Germain sobre la mesa.

Un proyecto de futuro

El Levante puede presumir de haber combinado dos aspectos que cotizan mucho en el fútbol de hoy en día. Los buenos resultados y una plantilla joven. Futbolistas que hace una o dos temporadas estaban en el filial y que hoy han realizado un salto mayúsculo al primer equipo estando aún en la primera etapa de su carrera.

Andrea Tarazona: Las estadísticas indican que la mejor edad para las porteras llega entre los 27 años y los 30. En el caso de Andrea Tarazona está desplegando seguridad bajo palos con solamente 19 primaveras llegando a competir con porteras como María Valenzuela o Andrea Paraluta. 19 partidos y tan solo 14 goles recibidos desde su debut.

Estela Carbonell: Todavía sin haber salido de la etapa juvenil, su participación en el primer equipo es cada vez mayor. De la misma forma que sucede en las categorías inferiores de la Selección Española. Con ella las granotas han encontrado a todo un puñal por la banda izquierda. El curso anterior todavía seguía ligada al filial pero este año el salto al primer equipo ha sido tan precoz como efectivo.

Silvia Lloris: Aunque su trayectoria en el primer equipo haya sido más longeva, nadie le quita esos 19 años recién cumplidos. Una temporada que empezó como pieza clave de la Selección Sub-20, levantando la Copa del Mundio, y que se cierra clasificando a Champions. En ocasiones de pivote y otras de central pero siempre con la mejor opción entre manos dentro del campo.

Paula Tomás: Una especie en extinción por su capacidad de adaptarse tanto al lateral derecho como al izquierdo. Llegó al primer equipo hace ya tres temporadas, después de toda una carrera en la cantera granota. El salto a la élite no fue de difícil adaptación, llegando a disputar 17 partidos en su primera temporada. Su nombre ha llegado a sonar para el Arsenal.

Erika González: En este caso no hablamos de un producto formado puramente en la cantera del Levante, pero sí de una jugadora que ha empezado a brillar como granota. Especialmente siempre que se le ha dado libertad para ser protagonista con el balón. Todavía en etapa juvenil, con 16 años abandonó el Sporting de Gijón para emprender una nueva y por el momento exitosa etapa en el Levante.

Sin duda el verano apunta a ser largo en Valencia. Fichajes para acabar de perfilar la plantilla, de hecho ya están sonando los primeros nombres, y una interminable cuenta atrás de cara a las eliminatorias previas que dan acceso a la ansiada fase de grupos. El Levante ya es equipo de Champions ahora toca seguir agrandando la leyenda de un club que se vuelca por el fútbol femenino y por un sueño.